Sobre mí

Verónica Morales

He elegido tantos caminos distintos que no sé por donde empezar... O sí. Por libros. Claro. Mis primeros recuerdos están unidos a ellos.

Como para muchas, la infancia fueron las aventuras que los libros nos ofrecían y nuestro modo de conocer el mundo. En mi barrio, uno de tantos, periferia de Madrid, encontraba la ruta que me llevaría a ser protagonista de mi propia historia…

Como os decía, mis primeros recuerdos están unidos a libros: libros que mi padre me leía y libros que, mientras crecía, robaba de sus estanterías. Pronto se dieron cuenta de que leer me hacía feliz, así que tooodo el mundo comenzó a regalarme libros. Y, hasta ahora, no hay mejor regalo que me puedan hacer.

Por donde iba… ¡Ah, sí! Mi padre me enseñó el amor por los libros y por esas aventuras de sofá que tanto le confortaban. Escribía también, mi padre. Poesía. Tardé bastante en conocer esa faceta, pero pasó que, cuando él murió, no se fue del todo, porque puedo volver a oírle en sus palabras cada vez que lo necesito. Se hizo, así, eterno.

Os decía al principio que no sabía por dónde empezar porque sí, he dado muchas vueltas hasta llegar aquí y contaros un poquito sobre mí. Y como este espacio de biografía está vivo, lo dejo abierto a cambios. De momento os dejo algunos de mis hits:

– Soy licenciada en Historia del Arte y comencé el doctorado en Historia del Cine. No lo terminé pero ese tiempo me regaló la oportunidad de vivir en Roma una temporada. Amor eterno a la Ciudad Eterna.

– Estudié producción audiovisual y he vivido algunos rodajes. Son sin lugar a dudas una de las experiencias más divertidas (y extenuantes) que he tenido en mi vida.

– Además de Roma, también he vivido en Bologna y Londres, ciudad de la que volví hace solo algunos meses después de casi ocho años.

– Escribo para salvarme. No me enseño al mundo. Pero una vez escribí un guion de cortometraje que gustó mucho. Una productora se interesó por él y yo puse como condición dirigirlo (yaaaa, lo sé…). Nunca se produjo.

– En los últimos años, volví a mi pasión por los libros y me pregunté cómo podía trabajar con ellos. Cazo erratas con facilidad y, tirando de ese hilo, decidí formarme como correctora ortotipográfica y de estilo. Ahora especializándome en gestión de proyectos editoriales.

Y de todo esto nace Punto de Tangencia, para darle voz de un modo profesional a los escritores que se mueven por la tangente, por la periferia de las letras. Las afueras siempre han sido mucho más interesantes, así que espero descubrirlas con vosotras…

Quizá otro día os encontréis nuevas anécdotas, mis gustos musicales o mi director preferido… Nuevos aprendizajes, porque me divierte y me sigo formando.

Pero que al final, es que la vida va de eso, ¿no? 

De aprender, vivirla y contarla. 

De hacernos seres de historias. 

De hacernos eternos.

Y de todo esto nace Punto de Tangencia, para darle voz de un modo profesional a los escritores que se mueven por la tangente, por la periferia de las letras. Las afueras siempre han sido mucho más interesantes, así que espero descubrirlas con vosotras...

Quizá otro día os encontréis nuevas anécdotas, mis gustos musicales o mi director preferido... Nuevos aprendizajes, porque me divierte y me sigo formando. Pero que al final, es que la vida va de eso, ¿no?  De aprender, vivirla y contarla.  De hacernos seres de historias.  De hacernos eternos.